Por Laura Benhumea
Penetra como clavo
triturando el alma,
este dolor
inaguantable,
inquietante
de piezas rotas
que no se construyen
en la nada
Así mi corazón respira frío
por tus desplantes de sentirte mío
Vaciando mis venas de dolor,
persigo esa alma que nació
en mis sueños
Delirante de pasión
me entrego al vacío,
ciega de luz
radiante en vida
No perturba mi dolor la nada
Saberte perdido
en mis sueños
y en mi noches
transcurriendo los infiernos
Saberte perdido
en insomnios
causando
pesar en mis dolencias
¿Qué tiene mi alma con tu vacío?
Un adiós. Ser nada.