Revisé el celular, nueve y diez de la noche, a buen paso en veinte minutos estaría en casa. Durante el trayecto me enfrenté al repulsivo espectáculo de una ciudad en decadencia.
Revisé el celular, nueve y diez de la noche, a buen paso en veinte minutos estaría en casa. Durante el trayecto me enfrenté al repulsivo espectáculo de una ciudad en decadencia.