Te quedaste con mi aroma doblado en tu cajón,
también con nuestra alacena de recuerdos, escondiste tus cariñosas formas de nombrarme,
y lo único que me dejaste fue la imborrable sensación de tu cuerpo, descansando junto al mío.
Te quedaste con mi aroma doblado en tu cajón,
también con nuestra alacena de recuerdos, escondiste tus cariñosas formas de nombrarme,
y lo único que me dejaste fue la imborrable sensación de tu cuerpo, descansando junto al mío.