El futuro es todo lo que se piensa pero no se dice. Es la geometría algebraica del recuerdo. Superficie de Riemann, angustia de lo que acontece, nombre que espera su turno.
Somos como las estaciones que dejan testimonios, banderas que ondeaban antes y que siguen ondeando ahora.
La música no se detiene: es el invierno del presente, la primera página de un libro. Allí, donde el futuro, es todo lo que se piensa pero no se dice.