Nací en tierra húmeda de vida y de viento,
donde la semilla alimentaba al hombre
y el hombre la protegía.
Crecí con los renacuajos, aprendiendo a vivir entre la tierra y el agua,
buscando la manera de calentarme al sol.
Busqué en los charcos espejos que me mostraran mi verdadero rostro,
busqué en lo diminuto lo infinito y en la oscuridad el color.
Me enseñaron a caminar los ciempiés,
aprendí con ellos a recorrer los caminos bajo las piedras,
laberintos a lo desconocido,
nuevos mundos que se podían encontrar después de la lluvia.
Estos me explicaron que dos ojos no eran suficientes para abarcar
las distancias entre los recuerdos y
que sólo acurrucándome bajo el mangle crecerían
mis raíces en la tierra.
Fui acostumbrándome a ocultarme entre las ramas,
vi como la luz se fragmentaba entre las hojas,
miles de siluetas se camuflaban temerosas.
Algunos se negaron a desaparecer,
comieron el veneno de la hormiga y
resistieron con letal colorido la depredación.
Entendí que los imaginarios asfixiaron a las sensaciones
y homogeneizaron la vida.
Al hombre se le olvidó respirar por la piel y
se acostumbró al silencio.
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Proyectos TESIS (MAC) Bogotá: Mejores trabajos de grado en artes plásticas y visuales de Colombia; Museo de Arte Contemporáneo. Proyecto: Tumaco lugar de encuentros. Septiembre 9 – octubre 31 de 2017
Es un proyecto artístico y pedagógico, el cual busca generar espacios de diálogo entre los habitantes del municipio de Tumaco (Colombia), estudiantes de colegios y universidades de la región, acompañados de especialistas en biología y lingüística. A partir de estos encuentros se desarrollan ejercicios plásticos que intentan fomentar la sensibilización y apropiación medioambiental.
La experiencia directa con el ecosistema del pacífico, así como la relación que tiene la comunidad de Tumaco con su contexto, generó una serie de reflexiones acerca del papel del arte –en este caso, la fotografía– y el artista como una herramienta creativa de participación e integración para la transformación.