Santino, te escribo desde Tarifa, al sur de España. No sé si conozcas por aquí. La verdad es que no he estado muy a gusto. Son demasiados hippies y el viento me deja tonto. No veo la hora de irme de aquí. Preferiría estar en Madrid bebiendo champán en el Saddle, pero bueno, ya sabes que tengo mi espíritu aventurero. No por nada estuve en Gambia y Birmania jugándome el pellejo por hacer periodismo del que ya no se hace en ningún lugar del mundo.
Bueno, te escribo porque me han llegado tus nuevos textos por diversos medios. Te confieso que estoy molesto porque no me los has enviado para editar en Cuarteles. Lo último que me mandaste fue ese cuentillo del tipo que corría en una pista con los números y esas cosas que te encanta meter a mitad de los textos. Me da gusto que ya no lo estés haciendo, porque creo que por fin te estás dando cuenta que no estás inventando nada nuevo. Las historias se deben de contar como son y sin esos experimentos que no ayudan en nada. Para que sigas mejorando de recomiendo que busques mi libro Viajes por doquier, es una buena guía para escribir bien.
No sé si te molestaste por las notas que te di en ese cuento y por eso no has enviado nada más a la revista, pero quiero que sepas que no fue nada personal. Ya sabes que lo único que yo te deseo es lo mejor y me gustaría mucho acompañarte en el proceso de hacerte escritor. Solamente vas a poder escribir bien si comienzas a centrarte. Nada de escribir de nostalgias que nadie entiende mas que tú. Nada de hablar de romances adolescentes como creyéndote Benedetti o Bécquer o vete tu a saber quien. YA NO ERES UN ADOLESCENTE. Entiendo que esas cosas sirven para las chicas, pero no puedes centrarte en eso. Mírame a mí, he estado con todas las que he querido y sin ser un romántico, solamente con talento y abriéndome paso en la intelectualidad.
He visto que también sigues publicando poesía. Va siendo hora de que superes esa etapa, porque no te llevará a ningún lugar. No hay un solo poeta que haya vivido en la comodidad y el lujo, que al final del día es lo único que vale la pena, porque es lo único que se puede tocar y disfrutar. Si aún así quieres hacer poesía tienes que escribir en sonetos y en rima, esas cosas de escribir nada más porque suena mas o menos bonito no tienen nada nuevo, ya todo lo dijeron antes que tú. La poesía solo sirve si se hace como lo hacían los grandes.
Por ahí también llegó a mis oídos que estás montando una obra. Ay, Santino… tienes que empezar a decidirte que quieres hacer. No puedes andar por ahí divagando y haciendo mil cosas. Tienes que concentrarte. Además ¡Ni eres dramaturgo! De verdad que no te entiendo. Encima me contaron que estás metiendo imágenes religiosas y cosas oscuras y raras. No entiendo tu obsesión con la religión, tienes que alejarte de eso también. Nada mas te pone cadenas que no necesitas y te limita mucho creativamente. Pero bueno, allá tú. De verdad, en cuanto puedas llámame, tenemos que hablar de eso. No vayas a cometer un error.
Pero bueno, basta de regañarte. Yo me largo de este pueblo en dos días para seguir con mi viaje europeo. A ver si subimos de gama, porque ya no aguanto. Ya sabes, los caprichos de las mujeres. Claro, no te había dicho, pero vine con Natasha, la redactora de la revista que siempre me sonríe cuando entro. Por aquí probé la manzanilla, déjame decirte que es repugnante, pero la borrachera que pone es gloriosa. Me quité de penas y hablé con algunas extranjeras en alemán, que es un idioma que a veces me cuesta. Natasha se molestó, pero bueno, eso pasa cuando sales con un hombre guapo jajaja.
En un par de días estaré en Saint Tropez, donde la vida es mejor. Nadar en esas aguas azules es lo único que quisiera ahorita. Si me emociono quizás hasta rente un bote para salir a pasear y despejarme un poco de todo el trabajo que he tenido. Vienen cosas muy buenas en la revista. De verdad que te conviene estar de nuestro bando. No me tienes que decir para saber que estás pensando en publicar tus cosas en Máscaras. Eso si me molestará. No pasa nada que publiques en las revistas de tus amigos, pero para jugar en grandes ligas es mejor con nosotros.
Bueno, me voy despidiendo porque en un rato tenemos unos masajes reservados frente a la playa y después tomaremos unos tragos viendo las luces de Tánger. A pesar de todo hay algunas cosas buenas aquí en Tarifa. Esas cosas que solo existen en pueblos chicos como este.
Mándale saludos a ilegible, ya sabes que le tengo mucho aprecio. Digo, si siguen juntos. Las cosas cambian rápido, ya te darás cuenta. Espero que tus papás estén bien, hace poco le escribí a tu mamá para saber como estaba, pero no me contestó. Recuerda mantenerme al tanto de tus proyectos y sobre todo recuerda CENTRARTE, tiene que empezar a tomarte en serio y dejar el jueguito del artista adolescente y precoz. Perdóname por insistirte tanto, pero es que quiero un futuro brillante para ti. Cuídate mucho, ten cuidado con los doblecara y con todo lo demás. Sobre todo, con las mujeres jajajaja. Te envío saludos y un fuerte abrazo desde Tarifa por el momento, quizás mi siguiente carta te llegue desde Helsinki. Soy un trotamundos.
Deseándote éxito,
tu querido Pedro Herbert.
Desde Tarifa, Mar Mediterráneo, Cádiz, Andalucía, España, Planeta Tierra.
P.D: No olvides llamarme, por favor, en serio tenemos que hablar de muchos temas.