El oro más valioso

Las preguntas que nadie ha contestado…

Qué poco necesito
si este sol de noviembre
entibia la mañana
con sus tímidos rayos
de luz, con ese limpio
abrazo para el frío
y las preguntas
que nadie ha contestado.

Haces de amor descienden
y abrasan en mi cuerpo
la paja seca
del tiempo y el espacio.

El oro más valioso
se encuentra en todas partes,
ramos de manzanilla
para mis ojos ciegos.

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