¿A dónde van
las nubes
cuando desaparecen?
Y el cielo
queda así,
totalmente despejado.
Casi que parece
una alberca gigante
o un río que recubre
a una esfera rústica.
Sin embargo, cuando
sucede esto, uno se
da cuenta de lo mucho
que hacen falta esas
pequeñas masas
de agua condensada.
Es así que el cielo
deja de ser una alberca gigante
o un río que recubre a una esfera.
Y más bien pasa a ser
un simple trazo azul,
que ni termina
por pintar todo el domo,
ni tampoco entusiasma
a nadie.