SREBRÉNICA. En Europa en la boca de la noche

Del poema de Gianfranco Longo

No reconocemos lo que viene
del presente, no reconocemos las notas
del pasado y los crisantemos entre naturalezas muertas,
como esfinges evocando el tiempo, en el misterio
y en su soliloquio, en el silencio del juicio,
al gemido de amor en este verano
tan espeso de bayas y hojas pardas,
como café. Desde la calle se escuchan los salmos,
recitados al anochecer, revelan la diversidad del olvido,
expansión y flexión de luces que lavan
la presencia, dosificándola para invocar a Dios,
porque lo reconocemos, lo percibimos
cuando nos amamos. En este archipiélago,
de tierras reflejadas en los ojos de un gato,
a través de la ironía y el venerado desapego,
brota un encanto de consuelo entre innumerables posturas,
repetidas y diferentes, siempre evidentes rasgos
de un apego que nos une, un secreto
que solo nosotros sabemos y que no nos atrevemos
ni siquiera a anunciar, una especial predilección
que destaca un paso a otra vida,
una audaz transgresión de elevación
de nuestro amor por Cristo, en la memoria
y en las cenizas, donde rastrear el hechizo,
sorprenderse por un instante, de nuestras edades.

SREBRENICA. In Europa alla foce della notte
(Ed. il Poligrafo, Padova 2020)

Non riconosciamo quel che proviene
dal presente, non riconosciamo le note
del passato e i crisantemi tra nature morte,
come sfingi rievocanti il tempo, nel mistero
e nel suo soliloquio, al silenzio della prova,
al gemito dell’amore in questa estate
così fitta di bacche e di brune foglie,
come caffè. Si odono dalla strada i salmi,
recitati a sera, rivelano le diversità dell’oblio,
espansione e flettersi di luci che mondano
la presenza, proporzionandola a invocare Dio,
perché lo riconosciamo, lo percepiamo
quando ci amiamo. In questo arcipelago,
di terre riflesse negli occhi di un gatto,
tramite di ironia e di ossequiato distacco,
affiora un fascino di conforto tra innumerevoli pose,
ripetute e diverse, sempre evidenti tratti
di un attaccamento che ci lega, un segreto
che conosciamo noi soltanto e che non osiamo
neppure annunciare, una speciale predilezione
che evidenzia un passaggio ad altra vita,
un’audace trasgressione all’innalzamento
del nostro amore a Cristo, nella memoria
e nella cenere, dove stanare l’incanto,
sorprendersi per l’attimo, delle nostre età.

(Ed. el Polígrafo, Padua 2020)
(traducción de Yuleisy Cruz Lezcano)

Gianfranco Longo (Bari, 1965) Premio Académico Internacional de Literatura Contemporánea “Lucius A. Seneca” en 2022; Biblioteca Nabokov de Poesía 2022, enseña Filosofía de la Paz en la Universidad de Bari “Aldo Moro”.

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