Minutos previos al duelo ante Mallorca por la sexta jornada de LaLiga 21/22, a disputarse en el Bernabéu (es decir, el nuevo Bernabéu en marcha), Alba Otero y Miguel Caballero se reúnen en el ‘bar de siempre’ para charlar de su Madrid.
En específico, sobre Vinicius Jr. y Eduardo Camavinga, ambos convertidos en las sorpresivas figuras en este inicio del Ancelottismo 2.0; el futuro en las laterales (el equipo ya sondea posibles fichajes ante las constantes lesiones de Carvajal), y, por supuesto, de las obras en casa, las cuales apuntan a un proyecto de estadio sin precedentes en el fútbol mundial (al puritito estilo Real Madrid, pues). Allá vamos…
Miguel Caballero: ¡Albita! ¿Cómo estás? Bueno, antes de que empiece el juego ante Mallorca, creo que vale la pena empezar esta charla sobre lo encendidísimo de Vinicius Jr. y de Camavinga en este arranque de temporada. A ver, está bien que siempre hemos sido del barco del brasileño, pero creo que nadie apostaba por los números que registra en este comienzo (5 goles y 2 asistencias en 5 juegos).
Y luego, Camavinga, figura en el arranque de Champions (asistiendo en el gol del triunfo ante el Inter, en el Giuseppe Meazza) y sacando las papas del fuego para ayudar al triunfo en Mestalla. Explícame, por favor…
Alba Otero: Veni, vidi, vici. Esta famosa frase acuñada a Julio César por su victoria frente a Farnaces II del Ponto en la Batalla de Zela, se la podrían atribuir a estos dos jugadores. Indiscutiblemente serán dos grandes generales de esta nueva era del Real Madrid. Mi sorpresa se centra más en Camavinga que en Vinicius Jr., ya que este último, como bien dices, nos ha salvado las papas del fuego más de una vez en los últimos 20 minutos de partido.
Centrándome en el jugador franco-angoleño, entro dentro del marco de las posiciones tácticas. Se debe posicionar a Camavinga tanto en la parte defensiva como ofensiva para que, de esta forma, cualquier cambio durante el partido se pueda mantener los 90 minutos. Sin embargo, en la parte ofensiva —sabiendo que son inamovibles, Benzema y Vinicius Jr.—, se vislumbra un afianzamiento por parte de Carletto que pasa de su asiduo 4-3-3 a un 4-4-2 para tener a Camavinga. Por lo que ahora te pregunto —y sé que era un predilecto para ti—, ¿cómo crees que entraría Mbappé en los planes de este nuevo Imperio madridista?
Miguel Caballero: Ay, Mbappé. Yo sigo soñando con Mbappé. Me hiciste pensar en Arde, memoria, libro antológico del escritor mexicano Rafael Pérez-Gay. En uno de los textos, uno de sus personajes habla del sueño recurrente que tiene con su padre muerto, a quien carga en los hombros mientras éste canta el famoso bolero Sin ti:
«Hay gente que sueña con sus perros o con viejos amigos de la infancia. Yo, en cambio, sueño con mi padre cada vez que puedo. Es una forma poco común pero útil de recuperarlo. Un modo de sanar una pérdida, por decirlo así». Pues eso me pasa con Mbappé. Tic, tac…
En fin, a lo que sigue. Sé que tienes muchas ganas de platicar —yo también— sobre el caso Dani Carvajal y sus constantes lesiones (este finde ante Valencia se volvió a romper). A mí me da mucha pena lo de Carvi porque desde su regreso al Madrid de Alemania (Bayer Leverkusen, en 2013), no hay temporada —incluidas finales de Champions o duelos clave del curso— que no caiga lesionado. Leo por ahí que en el Madrid acumula más de 20 partes médicos y casi 100 partidos ausente. Sabemos que Dani es un madridista de cepa, que apuntala la imagen del club en su apuesta por jugadores de cantera y shalalá; pero no podemos seguir así. Y vale la pena recordar que apenas fue renovado hasta 2025…
Alba Otero: Aquí voy a ser cruel. Sin miramientos. Me lloverán las críticas. No me importa. Sin embargo, la etapa de Dani Carvajal es la Crónica de una salida anunciada. Me recuerda a un personaje de nuestro querido Gabriel García Márquez. El azar de la vida, estar en el momento adecuado aunque no oportuno y se repiten las mismas malas acciones —en este caso, las lesiones.
“La fatalidad nos vuelve invisibles”, recuerdo una de las frases del mítico libro de Gabo y duele ver cómo una gran promesa del fútbol se desvanecerá con el paso de los años. Al final, el mal de las lesiones en la carrera futbolística te acompaña como una mala garrapata hasta el final.
También quisiera recordar que Mendy arrastra desde hace un par de semanas lesiones musculares que le imposibilitan jugar. No se ha estrenado en Champions y hoy, ante Mallorca, no va ni convocado. Según los informes médicos está totalmente curado, pero siente molestias. Y, Miguel, conocemos a nuestro Tito; enseguida que no ve resultados o no es rentable busca sustitutos y los nombres que comienzan a sonar son: Youcef Atal, Niza; Trent Alexander-Arnold, Liverpool y Reece James, Chelsea.
Sabemos que los negocios de nuestro querido no paran de Florecer —estoy en racha— y me gustaría que comentaras del nuevo Bernabéu y la nueva Ciudad Deportiva…
Miguel Caballero: ¡Disneytino! Qué risa con ese nombre, pero, a ver, vayamos por partes…
Lo de la nueva Ciudad Deportiva no hay mucha información sobre novedades, ya que todo está volcado al nuevo Bernabéu. Todo esto me recuerda una frase de la escritora mexicana Valeria Luiselli en su novela Desierto Sonoro, que dice así: «Nunca está del todo claro qué convierte un espacio en un hogar o un proyecto de vida en una vida.»
Me parece que el Madrid —es decir, Florentino Pérez, mi padre, nuestro padre— tiene muy claro por dónde pasa la continuidad a su hegemonía en la industria del deporte a nivel mundial; ese proyecto de vida (del club y de muchos de nosotros). Lo que veremos en verano de 2023 no tendrá precedentes. Creo, incluso, que no lo hemos dimensionado… bien valdría la pena buscar la voz de alguien que nos acerque un poco más de toda esta locura. ¿Qué te parece, Albita?
Alba Otero: Sería fantástico tener a alguien que nos pueda aportar más información y en el ‘de siempre’, cuantos más seamos compartiendo una pasión y cervezas, siempre será bienvenido o bienvenida. Haré lo que pueda, aunque ya sabes lo que me gusta embarcarme en nuevos periplos. Esta temporada viene fuerte…
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