Duele ser mujer en México: Mara Ximena Espinosa de los Monteros

Sin señas particulares (2020), de Fernanda Valadez; Noche de fuego (2021), de Tatiana Huezo; La civil (2021), de Teodora Mihai, y Ruido (2022), de Natalia Beristain, brotan en los últimos años como ejercicios fílmicos que muestran preocupación por dos asuntos que atribulan a la sociedad mexicana desde hace décadas: las desapariciones y los feminicidios. Películas valientes de cineastas certeras instauran una especie de nuevo género inaudito, que en las entrañas lleva eternas búsquedas de familiares, miedo, muerte, narcotráfico y autoridades inexistentes. Pero son historias que en su profunda esencia también llevan amor, el cariño incondicional materno que no se acaba porque el panorama sea oscuro y la adversidad, aplastante. El amor de una amiga o de un padre, de un hermano o una esposa; el amor como arma ante el terror de un país que desaparece y asesina a sus mujeres sin piedad, absorbidas por la noche.

Albedríos (2021) es quizá la propuesta más radical de esa nueva categoría insólita; un mediometraje onírico de corte experimental, que provoca reflexión sobre la violencia de género, las desapariciones forzadas y la terrible condena de vivir con miedo. Adaptación visual de la puesta en escena Concerniente al albedrío (2020), el filme es dirigido por Ignacio Ferreyra e interpretado por las actrices Daniela Palao y Mara Ximena Espinosa de los Monteros, como las dos almas que se confrontan y cuestionan lo que significa ser mujer, al centro de la violenta vorágine de los tiempos que corren. Retadora, poética e impactante, Albedríos ha sido multipremiada en festivales internacionales, mientras Concerniente al albedrío sigue presentándose en foros teatrales del país; se trata del trabajo de la compañía artística independiente Realidades Asimétricas.

Según Pier Paolo Pasolini, el encuadre es el punto de enlace entre la realidad y la obra de arte, el instante desde el cual todavía no es posible apreciar el desarrollo de la obra, aun cuando ya se encuentra en gestación. El encuadre quiebra la realidad, quedando atrapada en el filme para ser explorada como obra de arte dentro de la otra dimensión. Ese primer acoplamiento explota en Albedríos desde su arranque, con los estremecedores planos de cuerpos femeninos tirados por doquier. El espectador accede por medio del encuadre a ese universo de dolor y soledad trágica, donde también hay lugar para la esperanza que solo el arte puede translucir. Platiqué con Mara Ximena Espinosa de los Monteros, coguionista de Albedríos y Concerniente al albedrío e integrante de Realidades Asimétricas. Hablamos de pesadillas que se vuelven arte, influencias histriónicas, adaptaciones audiovisuales, feminismo y próximos proyectos.

Mara, hablemos un poco de tus inicios en el arte escénico. ¿En qué momento de tu vida decides convertirte en actriz? ¿Cómo te preparas antes de salir a escena?

Tenía 19 o 20 años, estudiaba la licenciatura de Filosofía en la entonces llamada Fes Acatlán de la UNAM. Sólo entraba a la clase de Estética, Epistemología, Marxismo y al taller de teatro del maestro Fernando Morales, las demás no me interesaban. De pronto me cayó el veinte y dije: ¿qué hago aquí?, yo quiero hacer teatro todos los días de mi vida.

Para salir a escena me preparo todos los días, esa preparación también sostiene y potencia cada función que doy. Ser creadora escénica requiere desarrollar una mirada de lo humano profunda y libre de prejuicios, estar alerta a la realidad, observar los detalles y mantenerse en constante autoconocimiento. Por otro lado, el cuerpo también es sumamente importante, aunque me convertí en madre recientemente y cuento con muy poco tiempo para mí, procuro mantener un cuerpo vivo, alerta y conectado con todo lo que soy. 

Ahora, antes de dar función la dinámica es despertar y hablar conmigo desde la honestidad de todo lo que me genera dar tal o cual función, procuro comer ligero y siempre tener dos horas mínimo para pasar mi texto, calentar cuerpo y voz, y concentrarme. Así era mi rutina de siempre hasta que empezamos a girar y llegábamos a teatros independientes que nos abrían sus puertas con la advertencia previa de que nosotros seríamos los únicos técnicos de nuestra función y teníamos el tiempo muy limitado, en esas circunstancias, no tenía la posibilidad de prepararme con dos horas de antelación y tenía que apresurar el proceso para estar lista.

¿A quién admiras en el mundo teatral y/o cinematográfico? ¿Quiénes consideras que son tus influencias a la hora de hacer arte en el escenario?

Mi corazón está dividido entre la fascinación que me provoca el drama y la tragedia por un lado, y la atracción que siento por la autenticidad y sencillez de algunas y algunos payasos de teatro y de circo. Así se explica que me inspiren creadoras como la actriz Ilse Salas o la directora y escritora Lola Arias, por un lado; y por otro, creadores como Darina Robles, Gabriela Muñoz o Alain Vigneau. Como muchas otras, el drama, la tragedia y la comedia son formas de ver el mundo. Parecen opuestas, pero es muy delgada la línea que las separa. 

¿Cómo nace la puesta en escena Concerniente al albedrío (2020)? Tengo entendido que está inspirado en el caso real de un familiar muy cercano a ti, ¿cómo fue el proceso creativo en la construcción del guion que escribiste junto a Daniela Palao e Ignacio Ferreyra?

Mi prima Karen Esquivel fue asesinada en 2016, un feminicidio tan desgarrador como cualquiera. Ante este tipo de situaciones no hay manera de nombrar, de decir nada. Cuando me enteré de su desaparición y posterior asesinato, yo vivía en Pátzcuaro, Michoacán porque me encontraba cursando el tercer año de la licenciatura en Actuación. Viajé a su funeral, me reuní con mi familia y regresé a Pátzcuaro. Se desató en mí una etapa de noches de pesadillas y mucha escritura en un intento por desahogar tantas emociones. Tres años después, estábamos Daniela, Ignacio y yo en un café junto a la Plaza de la Conchita en Coyoacán, hablando de esos sueños, esos escritos y Concerniente al albedrío, el título de la obra que Nacho ya había dado a lo que aún no sabíamos qué sería.

En 2021, surge la adaptación al lenguaje audiovisual, o como ustedes lo llaman, puesta en video con Albedríos (2021). ¿Por qué deciden adaptarla? Caminando entre el teatro y el cine, dos artes que se complementan y al mismo tiempo se alejan uno del otro, ¿qué diferencias descubres en cada espacio y cuáles disfrutas más?

La adaptación fue una necesidad que nos trajo la pandemia. Los teatros estaban cerrados, ya habíamos probado dar función por medio de Zoom y la experiencia se había quedado muy corta porque esta obra habla, entre otras cosas, del cuerpo presente. No sabíamos cuánto duraría la contingencia sanitaria así que Ignacio pensó en una alternativa de la que no esperamos mucho al principio. Fue más una manera de resolver y acercar Concerniente al albedrío que de crear una película. Ignacio es un apasionado del cine, todos sus referentes y conocimientos fueron clave.

Por otro lado, me gusta sentir que en el cine la magia puede perdurar, dejar rastro y registro. Pero el teatro ocurre una única vez, cada vez, por eso es fascinante y me llena de vida. No sabría cuál de las dos prefiero, pero sé que ambas, el teatro y el cine, tienen mucho que enseñarme.

El arte es catártico, ayuda a entender y superar las adversidades de la realidad que rodean al ser humano. Concerniente al albedrío y Albedríos no sólo son catárticas,también provocan una profunda reflexión sobre el miedo y la violencia que tienen atrapado al país. Sin embargo, el mensaje central del proyecto resulta esperanzador, con la poesía y el experimento como herramientas insólitas. ¿Consideras posible transformar a la sociedad por medio del arte? 

No sé si a la sociedad en conjunto pero sí a la persona que hace y ve teatro porque el teatro nos permite mirarnos en nuestra humanidad. Hay un mundo dentro de nosotros y es importante mirarlo de muchas formas y desde diferentes ángulos para entenderlo. A propósito de eso, coincido cuando el EZLN dice que para cambiar el mundo, primero hay que cambiar la forma en la que lo miramos.

Concerniente al albedrío tuvo mucho éxito con una gira nacional, mientras Albedríos se ha presentado en una cantidad impresionante de festivales internacionales, siendo galardonada en lugares como Inglaterra, Suecia, Turquía, Japón, Grecia y Francia. ¿Esperabas semejante éxito internacional? ¿A qué lo atribuyes, quizá a la universalidad de los temas que el filme atraviesa?

Efectivamente, nuestro trabajo ha resonado más en otras latitudes. Ha sido una pregunta abierta para la compañía, aún no sabemos del todo por qué no ha generado el mismo eco en México, donde la problemática de la violencia de género y los feminicidios están a la orden del día. Pero ha sido una sorpresa porque eso nos lleva a confirmar que la violencia de género es global y sólo se expresa de formas diferentes dependiendo de cada cultura, por eso ha sido sencillo, relativamente, dialogar con públicos de otros países a través de nuestro trabajo.

Por otro lado, también nos preguntamos si el desnudo permanente en Concerniente al albedrío y Albedríos ha influido, puesto que la gira nacional 2022 nos permitió observar que puede resultar impactante para públicos de algunas regiones de nuestro país, quizá eso también pudo significar una barrera en México.

Tu valentía e intensidad en el escenario es brutal. Eres madre, docente, actriz, guionista y cercana al movimiento feminista. Entonces, te pregunto Mara: ¿Qué significa para ti ser mujer hoy en día, en un mundo que cambia tan rápido? ¿Qué le dices a todas esas niñas y jóvenes que te ven como ejemplo a seguir sobre las tablas?

Elegí esta obra para hablar de lo mucho que me duele ser mujer en este país y de lo mucho que hemos perdido por ser mujeres. Como feminista, es inevitable no tener una mirada crítica al respecto y buscar siempre cambios desde lo personal hasta lo social y político. Sin embargo, la llegada de mi hijo también movió de lugar mi mirada, he procurado vivirme menos en la desolación y el desasosiego que este tema me genera e intentar vivir con alegría y cierta libertad. La responsabilidad de criar a un ser humano y el asombro que la experiencia conlleva me ha abierto nuevas preguntas y posibilidades.

Daniela Palao, Ignacio Ferreyra y tú, forman la compañía escénica y audiovisual Realidades asimétricas, que recientemente tuvo presentaciones en Argentina y Uruguay. Los premios y las funciones de Concerniente al albedrío y Albedríos siguen imparables. ¿Qué otros proyectos están preparando? De forma individual, ¿tienes algún proyecto en puerta?

Como compañía, queremos dar a conocer Concerniente al albedrío internacionalmente, así como sucedió con Albedríos. Estamos trabajando duro para que eso suceda. De igual manera, estamos trabajando en otros proyectos teatrales y en un nuevo proyecto audiovisual, es seguro que tendrán noticias más adelante. Nunca dejamos de trabajar, pero, como sabemos, conseguir los recursos para producir es siempre un tema por resolver para las y los creadores independientes.

Por otro lado, mi experiencia de la maternidad impactó fuertemente en mi vida creativa. Puse una pausa en mi carrera profesional cuando nació mi hijo Emir, quien tiene dos años actualmente y he ido retomando paulatinamente, intentando que mi regreso no sea agresivo con mi propia experiencia de la maternidad. Para conseguirlo, dar clases ha sido una manera efectiva y rentable, porque dar clases es ser minucioso en la técnica y ejercitar la creatividad escénica y poética. Me apasiona la docencia en todos los niveles educativos, por lo que imparto clases de Artes escénicas en distintas escuelas de Querétaro, mi actual lugar de residencia.

También trabajo como agente cultural en un programa gubernamental llamado Convite Cultural “Marionetas de Barrio” utilizando el teatro para fortalecer el tejido social y la identidad comunitaria en la colonia Desarrollo San Pablo de la delegación Epigmenio González. 

En cuanto a teatro, como comentaba anteriormente, estoy en la fase de mi trayectoria en la que me siento enloquecida por el clown teatral, probablemente mi próximo proyecto sea como directora de madres creadoras en un laboratorio de clown para maternal que arrancaré próximamente y del cual tendrán noticias por medio de redes.

Albedríos puede verse en el siguiente link: https://realidadesasimetricas.vhx.tv
Apoya el proyecto de Realidades Asimétricas: https://realidadesasimetricas.com/apoyanos/

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