Mariposas de mal augurio entran de nuevo en mi habitación, con la herencia de alas rotas viajan dignas de la herencia de Ícaro; escapan de la prisión que imponen las ventanas y huyo con ellas, siendo apenas la sombra de un ser alado, me dispongo a escapar de la invernal tradición de voltear a ver […]
El quinto rostro de Rorschach




















